Son padres/madres que mantienen relaciones cálidas y estrechas con sus hijos/as y muestran una gran sensibilidad ante sus necesidades. Fomentan la comunicación, alentándoles a expresar y verbalizar abiertamente las emociones, preocupaciones, problemas…
A la vez, exigen cierta dosis de esfuerzo en situaciones que supongan un reto para los niños o las niñas; y establecen normas firmes y coherentes, explicando porqué deben cumplirse.
Valoran la individualidad de sus hijos/as pero teniendo en cuenta las limitaciones sociales; respetan las decisiones de independencia, los intereses las opiniones y la personalidad de los pequeños.
Los padres y las madres que con un estilo educativo autoritario, valoran el control y la obediencia incuestionable; cuando sus hijos o hijas se saltan alguna norma, les castigan enérgicamente. No son especialmente cariñosos ni comunicativos.
Son padres/madres afectuosos pero poco exigentes, que valoran la autorregulación de los niños/as.
A la hora de imponer normas o reglas, explican las razones pero pocas veces castigan. Incluso consultan con sus hijos/as sobre las decisiones relacionadas con las normas o reglas.
Son poco afectuosos y exigentes. Por circunstancias de diferente índole, se enfocan en sus propias necesidades, dejando de lado las de sus hijos/as.
Son padres/madres ausentes, no ejercen ningún control sobre las actividades de los niños/as ni apenas se comunican con ellos/as.
¿QUÉ CONSECUENCIAS TIENE CADA UNO DE LOS ESTILOS EN LOS NIÑOS O NIÑAS?
Dependiendo de cómo eduques a tu hijo o hija, tenderá a desarrollar ciertas características aunque hay otras muchas variables que también intervienen como son: la personalidad, las experiencias en el colegio o con la familia extensa, el entorno... Es decir, que aunque tengas dos hijos y a los dos los eduques exactamente igual, no tienen por qué tener las mismas dificultades, problemas o características.
Lo que quiero decir es que es algo orientativo, si tendemos a educar de una forma, habrá más posibilidades de que desarrollen ciertas características en el futuro.
Cuando se tiende a un ESTILO DEMOCRÁTICO, los hijos o hijas crecen en un entorno el que hay unas normas claras y bien comunicadas; en una casa en la que se sienten comprendidos, queridos y escuchados. Todo ello propicia el desarrollo de una buena confianza en sí mismos (alta autoestima) y, por lo tanto, será más probable que se conviertan en personas más independientes, exploradores y satisfechos. También desarrollarán buenas habilidades sociales y tendrán un mejor rendimiento escolar; así como un mayor autocontrol, presentando escasos problemas de conducta.
Los hijos de padres
AUTORITATIOS, crecen en un entorno poco afectuoso y con unas normas muy estrictas que hay que cumplir sin rechistar. Por lo que es más probable que desarrollen una baja autoestima y sean personas más retraídas, con dificultades a la hora de relacionarse y descontentos.
Ante esto, dependiendo del temperamento del niño o la niña y otras variables, pueden desarrollarse dos reacciones diferentes: algunos niños presentarán hostilidad y rebeldía y otros tenderán más a la sumisión.
En cambio, cuando los padres ejercen un estilo PERMISIVO, los hijos o hijas crecerán en un ambiente afectuoso, con buena comunicación pero carente de normas y exigencias. En el caso de haber alguna norma no se exige que se cumpla o no hay consecuencias. Esto dará como resultado personas inmaduras y con bajo control de impulsos (puede desembocar en consumo de drogas y/o problemas de conducta). Aunque suelen ser personas alegres y vitales, suelen tener problemas sociales a la hora de relacionarse y estar desmotivados.
Las personas que han crecido en un ambiente NEGLIGENTE tenderán a una baja autoestima y a presentar problemas emocionales, de conducta, de abuso de drogas, escolares... y desmotivación, entre otras. Debido a que su padres y/o madre ha estado ausente por diferentes motivos como puede ser problemas de salud mental, abuso de drogas... Son casos extremos de abandono. Aunque, como ya he comentado antes, no necesariamente todas las personas que crecen en un ambiente así desarrollan estas características; entre otros motivos, en este caso, por una característica llamada RESILIENCIA (un tema apasionante también éste de la resiliencia del que podemos hablar otro día o buscar más información).
Por último, me gustaría añadir que, aunque la comunicación verbal es muy importante en la educación de los hijos y las hijas. Hay prestar mucha atención a nuestra conducta porque, por si alguna circunstancia, hay una contradicción entre lo que decimos y hacemos, los niños y niñas siempre optan por tener en cuenta la conducta.
¿CON QUÉ ESTILO TE IDENTIFICAS TU?
Hasta la semana que viene 👋